2/08/23

Con más de 100 años, una anciana se emociona

 El versículo bíblico Eclesiastés 12:1 dice: “Acuérdate también de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, y se acerquen los años en los cuales dirás: No tengo en ellos contentamiento. 


Por lo tanto, el versículo bíblico leído anteriormente es una lección destinada a enseñar a los jóvenes la importancia de servir a Dios en la juventud, porque en la vejez la «felicidad» tiende a disminuir por el cansancio natural del cuerpo. Por otro lado, el testimonio de Nilza Rodríguez muestra que aún en la vejez es posible seguir sirviendo al Señor y realizar con alegría actividades importantes para la Iglesia, como Interceder. “Cuando vi a los jóvenes salir adelante, pensé que era lo más hermoso. Así que llamé al pastor, le pedí una camiseta y le dije: ‘¡Yo también quiero ser Calebe!’”, dice la mujer mayor, y recordó un proyecto que hizo en su iglesia local llamado Mision Calebe.

El Poder de la oración
Según el portal de noticias guiame, la misión de Calebe es un programa de 18 días que toma la forma de visitas domiciliarias. Pero por la salud de Doña Nilza la de una persona con edad demasiado avanzada pero con un espíritu vivo, ella decidió unirse a la misión pero orando e intercediendo por los evangelistas.
«Mi madre siempre estuvo conectada con la iglesia», dijo el José Aurinelson hijo de la anciana. «Está un poco frágil en este momento, pero todavía quiere permanecer activa haciendo algo para la iglesia. Ella fue una inspiración para mí y para otros que de alguna manera se sentían incapaces o que por alguna causa física no pueden o simplemente no querían ayudar. «
El pastor de la iglesia local mostró su contentamiento con la iniciativa de Nilza. “Ella es la prueba de que no hay límite de edad para hacer las cosas por Dios, encontrar a los demás y orar por el reino”, comentó.